Chevron y Shell firmaron su sociedad al oleoducto VMOS

(ADN).- Chevron y Shell, las dos empresas multinacionales con más exposición en Vaca Muerta, formalizaron su incorporación al vehículo societario que llevará adelante la construcción del Vaca Muerta Sur (VMOS), el megaproyecto que prevé el tendido de un oleoducto de más de 430 kilómetros desde Neuquén hasta las costas de Río Negro y la instalación de una terminal de exportación en Punta Colorada.
Si bien Chevron y Shell integraban el esquema asociativo original con el que YPF y otras cuatro petroleras locales vienen trabajando desde hace tiempo -de hecho, directivos de ambas compañías firmaron a mediados de diciembre del año pasado el acuerdo de lanzamiento de la iniciativa en las oficinas de YPF en Puerto Madero-, restaba la firma de los contratos de incorporación definitiva; una instancia que se terminó de homologar la semana pasada, según reveló ayer el sitio EconoJournal.
“Para compañías majors como estas, la toma de decisiones es más compleja porque precisan del aval de sus casas matrices, algo que siempre les lleva más tiempo que a las empresas con accionistas argentinos”, explicó un alto directivo que participa del proyecto. En la práctica, agregó, la presencia en carácter de socios de Shell y Chevron representa un fuerte espaldarazo por el VMOS porque contribuirá significativamente a poder conseguir financiamiento internacional para la obra, que demandará una inversión total de más de US$ 2500 millones. “La presencia de dos empresas multinacionales de este calibre facilitará la estructuración del project finance para obtener créditos a tasas bajas en el exterior. No es un tema menor”, explicó la misma fuente.
El esquema original prevé que las siete empresas socias del VMOS —YPF, Pluspetrol, PAE, Vista, Pampa, Chevron y Shell— solventen con equity el 30% del costo del proyecto, en tanto que el 70% restante se estructurará con créditos de bancos y entidades internacionales.
En lo político, la incorporación de Chevron y Shell puede interpretarse como un claro respaldo institucional al proyecto, dado que el aval de las empresas multinacionales se produjo después de que se generara un contrapunto con la gobernación de Río Negro, que negocia la inclusión de algún instrumento recaudatario para participar de la renta del proyecto. Aunque algunas petroleras cuestionaron ese planteo, lo concreto es que si Shell y Chevron continuaron adelante y confirmaron su participación es una señal de que diferendo entre las partes podría resolverse en los próximos días.