El legislador Jorge Ocampos dijo que «necesitamos un nuevo Plan Integral Frutícola»
“El enorme esfuerzo fiscal y la transferencia de recursos que implica la readecuación del tipo de cambio junto con la eliminación de las retenciones al sector frutícola regional, debe ser acompañado por políticas activas de los estados nacional y provincial que aseguren la llegada de estos beneficios al pequeño productor” indicó el Legislador Jorge Ocampos, presidente del Bloque del Frente Progresista CC-ARI.
“Es necesario que el Estado este presente y además canalice parte de esos recursos al Plan Frutícola Integral (PFI) para que, de esa manera, no sólo se atiendan las urgencias coyunturales, como las que actualmente están reclamando las Cámaras del sector, sino que se pueda repensar y planificar una nueva fruticultura a mediano y largo plazo para nuestro valle” manifestó el parlamentario cipoleño.
“La desestimación y falta de actualización del Plan Frutícola, fue la más clara señal de la nula voluntad política del anterior gobierno nacional para llevar adelante una Política de Estado seria e inclusiva en la materia. El PFI consistía en un acuerdo de trabajo conjunto a mediano y largo plazo entre la Federación de Productores de Fruta de Río Negro y Neuquén, la Cámara Argentina de Fruticultores Integrados (CAFI), la Cámara Argentina de la Industria y Exportación de Jugos de Manzana, Peras y Afines (CINEX), las provincias de Río Negro y Neuquén y el Estado Nacional a través del Ministerio de Agricultura, el INTA, el Senasa y de la Universidad Nacional del Comahue para discutir, planificar y ejecutar acciones compartidas que atendieran los problemas de fondo de la fruticultura” reseñó Ocampos.
Puntualizó que apuntaba a programas muy concretos con metas y acciones perfectamente definidas, Capacitación, Financiamiento, Información, Investigación, Desarrollo , Calidad de productos y procesos , Transparencia y seguridad jurídica , Sanidad y Asociativismo y desarrollo de mercados tanto interno como externo. Para el financiamiento se creaba un fondo por el término de 10 años y el propósito principal era alcanzar una fruticultura más competitiva, en el marco de la equidad social y la sustentabilidad ambiental, recordó el legislador.
“La modificación del tipo de cambio y la eliminación de las retenciones implican un incremento de la tasa de ganancias de las empresas exportadoras cercana al 100%. Si esperamos que “la teoría del derrame” redistribuya equitativamente los beneficios asociados a esta situación habremos perdido una nueva oportunidad histórica” concluyó el legislador frentista.