Sigue preocupando los niños quemados que llegan al hospital de Bariloche
Bariloche (ADN).- A pesar de que en 14 años se redujo a la mitad la cantidad de casos asistidos de niños quemados, la problemática sigue siendo motivo de preocupación de la Asociación de Pediatras que vuelven a lanzar una campaña de prevención. En 1997 los pediatras de Bariloche comenzaron a registrar los casos de niños quemados por la gravedad de las cifras que ascendía a 266 consultas y 58 internaciones en un año. A partir de allí cada año se realiza la campaña de difusión de medidas preventivas para quemaduras, que según los registros en su mayoría se producen por el derrame de líquidos calientes o por salamandras, brasas y otros focos de calor.
En 2011 (los períodos se miden de junio a mayo de cada año) la cifra cayó a 130 pacientes y 18 internaciones con una gravedad moderada y continúan siendo los menores de 5 años los más afectados.
En el período junio de 2011- 2012 el 60% de los casos fueron de menores de 5 años, con un 51% de las consultas producto de quemaduras por contacto con salamandra, fuente de calor o brasas, un 47% por líquidos calientes y un 2% por plancha. Además se detecta en las estadísticas realizadas en guardia que los niños en su mayoría (90%) estaba en presencia de sus padres al momento de quemarse.
La falta de resguardos de las fuentes de calor con las que puede estar en contacto los niños, son eje de las campañas de difusión –realizadas por la Subcomisión de Prevención del Trauma de la Sociedad Argentina de Pediatría Filial Lagos del Sur y el Servicio de Pediatría del Hospital Zonal Bariloche- de medidas de prevención que realizan los pediatras cada año y que esta vez tienen el respaldo de la Cooperativa de Electricidad Bariloche que difunde estas medidas en sus espacios publicitarios y medios de comunicación.
Los registros de pediatría indican además que la tasa de morbilidad por quemaduras el año pasado fue de 2,8 por mil, cuando el primer año del estudio era del 9,6 por mil.
Según los médicos Diego Schnaiderman y Eduardo Zori, “si bien los casos diminuyeron en los últimos años, siguen siendo una causa importante de morbilidad y nos recuerda que el problema sigue instalado en nuestra sociedad, de una manera muy importante”.
Entre las medidas de prevención se recuerda que no hay que servirles a los niños la leche caliente; hay que proteger con un cerco las estufas y/o salamandras; fijar la cocina a la pared y usar siempre las hornallas de atrás; además de proteger los enchufes. (ADN)
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