“La Super» de Roca denunció discriminación con la publicidad y presión del canal oficial

(ADN).- Una particular situación se generó con la emisora “La Super Radio” de General Roca, que sus propietarios definen como presión a la libertad de prensa. Denuncian que se vulneran «normas constitucionales de manera arbitraria e intempestiva, disminuyendo o cortando la pauta publicitaria», a la vez que se anticipa que esta situación tendrá derivaciones en los estrados judiciales cuando denuncien arbitrariedad en la asignación de pautas publicitarias.

Además repudiaron una carta documento remitida por José María Muñoz, apoderado de Radio y Televisión Río Negro-Canal 10, que intima a retirar en el término de 15 días la antena y el equipo transmisor que la “Super” tiene en un predio del canal oficial, actitud que calificaron como una clara intencionalidad de silenciar a la emisora roquense.

El reclamo ante la Justicia por la falta de pauta publicitaria oficial tiene amplia jurisprudencia en el país, tales como el caso del diario Río Negro con la provincia de Neuquén, la editorial Perfil, contra el Estado nacional o el diario Hoy de La Plata, contra la municipalidad de la ciudad de la capital bonaerense.

”La Super” de General Roca, inició su actividad el 13 de febrero del 2007) y trabajan en la emisora unas 20 personas, que conducen Emilio Occhionero y Juan Carlos Occhionero, conocidos vecinos del Alto Valle rionegrino y con vinculaciones desde hace años con la actividad periodística y publicitaria, quienes hicieron conocer esta actitud de las autoridades provinciales.

La información fue dada a conocer a través de un comunicado titulado “No nos callarán tal fácilmente”, firmado por Medios Roquenses S.R.L., Licenciataria de LRG 746 Super Radio FM 96.3, donde se explica lo siguiente:
«Construimos un medio legal desde su primer día y destinado por vocación a ser el camino abierto a todas las voces que quisieran opinar sobre las cuestiones que afectan a la vida de los ciudadanos rionegrinos y particularmente a los de General Roca y localidades vecinas. Y seguramente este último fue nuestro pecado no perdonable.

Desde el inicio de esta gestión de gobierno, allá por 2012, vimos cómo nos recortaban pauta publicitaria provincial pretendiendo ahogar nuestras finanzas y procurando con ello, una extorsión encubierta por abrir nuestros micrófonos a quienes opinaban distinto a lo que quiere imponer el oficialismo.

Comenzamos hace mucho tiempo a generar caminos de diálogo para poder resolver este tema, pasaron más de cinco años de lucha e intentamos con todas las posibilidades a nuestro alcance, hasta llegar al máximo nivel de responsabilidad provincial. En todos los casos, la respuesta fue la misma. Poco a poco mayor presión para querer silenciarnos. Hasta que desde enero de este año, nos sacaron definitivamente de los medios que reciben pauta oficial.

Hace apenas unos días en un correo directo al señor Gobernador le expresamos nuestra situación límite, generada por la desigualdad de trato para con los otros medios que auspician acciones de gobierno sin restricciones, y junto a ello, le expresamos nuestra única alternativa de tener que recurrir a la Justicia buscando remediación. Si algo le faltaba a los exabruptos gubernamentales, en respuesta a lo mencionado anteriormente, recibimos una intimación formal de rescisión contractual improcedente e ilegal, intentando provocar nuestro silencio de modo definitivo.

Hay normas que respetan y protegen la libertad de expresión y prensa, y este gobierno, vulnera esas normas constitucionales de manera arbitraria e intempestiva, disminuyendo o cortando la pauta publicitaria. Recurriremos a la Justicia, porque queremos que terminen las persecuciones y encono, de quienes tienen un pensamiento autoritario, discrecional y toman el patrimonio del Estado como propio, para sancionar y castigar a quienes no se arrodillan ante ellos.

La libertad de expresión es una premisa irrenunciable de nuestros medios, creemos en la libertad de informar y ser informado que tenemos los ciudadanos. Esperemos que esta batalla tan desigual no la terminemos perdiendo dado que nuestro ocasional adversario probablemente usará y abusará de su poder para lograr su cometido.

Si en algún momento los que permitimos opiniones de la diversidad del arco político y social dejamos vacante el espacio de modo definitivo, sabrá el pueblo rionegrino valorar la razón de fondo, para que ello ocurra”.

Ojalá se pueda alcanzar Justicia en tiempo y forma poniendo límites al atropello y a las actitudes dictatoriales de este gobierno provincial”.

Un poco de historia
Según relataron a ADN los directivos de la “Super Radio”, «las diferencias de este gobierno con nuestros medios, comienzan cuando asumen y realizan una supuesta clasificación sobre los medios de comunicación provinciales».

“Descreemos –indicaron- que sus autores la hubiesen realizado mediante algún método que no sea la discriminación y la subjetividad, en función de intereses políticos que nada tienen que ver con medios que cumplen con la legislación vigente (por ejemplo, el de cumplir con el 70% de programación regional y contar con la autorización del organismo competente), y tampoco con el fomento de la libertad de expresión y de la circulación libre de ideas”.

Relataron que esta actitud continuó y «se agravó con el tiempo, y a pesar de innumerables gestiones para solucionar este desigual reparto de pauta publicitaria, no logramos revertirlo».

Puntualizaron que “luego de comunicarnos con el Gobernador y alertarle por el estado en el que estaba la situación, donde le expresamos que algunos de sus funcionarios nos obligaban a judicializar el tema porque no podíamos soportar más esta discriminación tan evidente, recibimos una carta documento intimándonos a retirar la antena y el equipo transmisor en 15 días del predio de Radio y Televisión Río Negro SE. Es oportuno aclarar –destacaron- que hay un contrato en vigencia y que en esta carta documento tampoco se tuvo en cuenta (¿o sí?) que en 15 días es imposible lograr gestionar ante la Comisión Nacional de Comunicaciones y el ENACOM el cambio de asentamiento de los equipos. Asimismo, en la misma, no fundamentaron las razones por las que debemos retirarnos del predio”.

Y se preguntaron ¿no es llamativo que durante nueve años nunca manifestaron un problema y ahora lo buscan?”.