«Si no están conformes en Río Negro, que se retiren», dijo Weretilneck de EdERSA
El gobernador de Río Negro, Alberto Weretilneck, consideró hoy que «la empresa EdERSA está tratando de confundir a la sociedad y culpar a la Provincia por su actual situación financiera, cuando en realidad son ellos los que no están cumpliendo» y agregó que «si no están conformes con el trato que reciben, que no es más que lo que marcan las normativas, entonces que se retiren de Río Negro y dejen el servicio en manos más responsables”.
De esta manera respondió a las aseveraciones de las autoridades de EdERSA, quienes habían acusado a la Provincia de intentar un “ahogo financiero” de la distribuidora de energía.
Weretilneck señalò que “la Provincia nunca ha dejado de cumplir sus obligaciones con EdERSA. Muy por el contrario, es la empresa la que ha incumplido casi sistemáticamente con sus compromisos con un servicio deficiente, con múltiples problemas para los usuarios como consecuencia de su falta de inversión en el sistema”.
“La negligencia de EdERSA no es sufrida únicamente por el Estado provincial, sino por los miles de usuarios del sistema eléctrico en la provincia que padecen con frecuencia las consecuencias del mal servicio. Prueba de ello es la multa por 53.500.000 pesos que el EPRE debió imponerle por dejar a miles de usuarios por más de diez horas sin servicio o por sufrir más de seis cortes en un mes”, sostuvo el mandatario.
Agregó Weretilneck que “como Estado debemos garantizar que se le cumpla con los servicios a todos los rionegrinos, pero estamos ante una empresa que no lo está haciendo y que en vez de asumir sus responsabilidades, busca culpar al Gobierno por sus desmanejos y el vaciamiento de la empresa que están haciendo”.
“Así como cumplimos con los rionegrinos, el EPRE ha cumplido con EdERSA a través de la aplicación de los cuadros tarifarios correspondientes y toda la normativa vigente. Como respuesta, lo único que hemos recibido son amenazas, infundios y extorsiones por parte de EdERSA, como la de tratar de cortar el servicio eléctrico a Aguas Rionegrinas y dejar así sin agua a todas las familias de rionegrinas”, remarcó el Gobernador.
Agregó que “mes a mes, cientos de miles de usuarios rionegrinos le pagan su factura a EdERSA, pero la empresa no hace lo propio con Compañía Administradora del Mercado Mayorista Eléctrico (CAMMESA), poniendo en peligro el servicio en nuestra provincia y la continuidad de las tarifas sociales y el Plan Estímulo”.
La propia CAMMESA informó en agosto pasado a la Secretaría de Estado de Energía de Río Negro, que la deuda EdERSA al 31 de enero de 2016, ascendía a la suma de 330.269.710 pesos, así como también existía un pasivo por operaciones posteriores a dicha fecha de $117.619.324,42.
“O sea, ellos no pagan y la culpa es nuestra. Realmente es inadmisible lo que están planteando”, remarcó el Gobernador.
Recordó además que “hace tres años, cuando los accionistas de EdERSA decidieron comprar su participación en la empresa, conocían perfectamente cuáles eran las tarifas existentes en la Provincia y cuál era el Marco Regulatorio vigente para su actualización periódica. Ahora, si compraron la empresa para venir a aplicar sus reglas y no las de las leyes provinciales, están equivocados”.
“Siempre respetemos los derechos de nuestras empresas concesionarias de servicios o recursos naturales. Pero hay compromisos indicados en las leyes y contratos que se deben cumplir. Nuestra responsabilidad ante el pueblo de Río Negro es exigirles que cumplan su parte de los acuerdos; máxime cuando estamos hablando de un servicio público esencial y tan sensible como la electricidad”, añadió.
Sostuvo en este marco que “reiteramos que los actuales accionistas no han invertido ni un peso propio en mejorar el servicio. Los balances no reflejan ningún aporte genuino de capital de ellos en los últimos años. Por el contrario, lo único que han hecho desde su ingreso a la empresa es pedir aumentos tarifarios y endeudar a la compañía, mientras todos los índices de calidad y producto técnico del servicio que nos prestan se siguen desplomando. No hubo inversión y por ello el servicio decayó”.
“Las reglas de juego y las condiciones son claras. Estuvieron establecidas desde un primer momento, y si la empresa no hizo las inversiones que correspondían cuando las condiciones les eran favorables, no puede culpar ahora a la Provincia por su ineficiencia. Insisto, si no están conformes con su situación en Río Negro, pueden retirarse y dejar el servicio en manos más capaces”, manifestó finalmente.