Tres empanadas. ADN
La negociaciones salariales desvelan al Gobierno. La paritaria docente está empantanada, aún no comenzó la judicial y poco se sabe de la legislativa. Los estatales recibieron un dinero a cuenta de futuros aumentos, pero cosechó críticas de todo el arco gremial. El SEPURN evidenció que ese incremento en los sueldos más bajos del Ejecutivo implican 40 pesos por día. Se mantiene la idea de no superar el 17% pero todos los indicadores apuntan a que la inflación en 2017 alcanzará, al menos, el 23%.
Juan Carlos Scalesi llegó a la Casa de Gobierno con una comitiva de UPCN para participar de la Mesa de la Función Pública. Se fue con un acuerdo con sabor a poco. «No estamos conformes, pero es lo que hay», dijo. Alberto Weretilneck otorgó una suma fija a cuenta que ronda el 10% a pagar con los haberes de marzo. En la base salarial, el incremento es 1.200 pesos.
Ese acuerdo no incluye, como quería Scalesi, la recuperación del poder adquisitivo de 2016. El año terminó con una inflación del 41%, lejos de lo acordado por los estatales. Pero el Gobernador se mantuvo en su postura. La negociación sólo incluye 2017. Es entendible. UPCN firmó un aumento anual, sin posibilidades de revisión ni cláusula gatillo. No hubo resguardo.
Lo que hizo el Gobierno fue avanzar en el sector del Ejecutivo, como tenía previsto hacerlo con los docentes: 10% en marzo, y el resto en tramos. La próxima reunión será en abril. De todos modos, la Mesa de la Función Pública no cerrará oficialmente las negociaciones hasta tanto no esté firmada la paritaria con UnTER. Pero el adelanto y la foto de Scalesi con Weretilneck, sonaron a provocación en el sindicato que conduce Patricia Cetera.
ATE calificó el adelanto de «miserable» y se mantiene en el reclamo del 40% de aumento. El SEPURN que conduce Jorge Zapata pidió una ley de paritarias para los estatales, y denunció que el adelanto llevará al bolsillo de los trabajadores un incremento de 40 pesos por día.
También generó ruido en la Policía el aumento a cuenta. Primero porque es «insuficiente», dijeron voceros (en estricto off the record ya que no pueden hacerlo públicamente) a esta agencia. Segundo, porque al ser no remunerativo, no alcanza a los retirados, cuyo salario está enganchado a los activos.
Todavía esperan las paritarias judiciales y legislativas. Esta semana hubieron reuniones preliminares entre el jefe de APEL, Alejandro Gatica y el secretario administrativo, Oscar Porro. Podría haber novedades esta semana. Se filtró que esa negociación ronda el 18% de aumento para los trabajadores de ese sector, que incluye a los organismos de control.
Los sindicatos se mueven en esta coyuntura. Se fusionaron las dos CTA siguiendo los pasos que dieron las centrales en Buenos Aires. También la CGT rionegrina vuelve al ruedo. El lunes emitirá un documento adhiriendo al paro nacional dispuesto por el triunvirato cegetista para el 6 de abril. Con la firma de Rubén Belich el comunicado respaldará la lucha docente y tendrá duras críticas al gobierno provincial por la «protección» al legislador Rubén López, acusado de abuso sexual.
La CGT también denunciará los aportes que el Gobierno hace a los organizaciones sindicales aliadas al oficialimo, especialmente al gremio de fruta que conduce López. Tiene en su poder el Decreto Nº 29 del 13/01/2017: «Otórgase un aporte no reintegrable por la suma total de Pesos Un Millón Setecientos Cincuenta Mil ($1.750.000,00), a favor del “Sindicato de Obreros Empacadores de Fruta de Río Negro y Neuquén” (CUIT N° 30-54879452-4), destinado a cubrir los gastos que demandaría la materia prima para la confección de guardapolvos mochilas y cartucheras.- Expte. Nº 036.072-SP-2016».
Pero no es la única derivación política del caso López. El Frente para la Victoria denuncia que la actividad legislativa está parada «porque el Gobierno no sabe qué hacer con el legislador» que hoy está en uso de licencia. El presidente del bloque, Alejandro Marinao, repite que el oficialismo frena la convocatoria de Comisiones. Los interlocutores de la bancada de Juntos Somos Río Negro, indican ese motivo.
Esta semana los gremios volverán a la carga con sus reclamos salariales. La multitudinaria marcha federal docente sustenta la lucha en los distritos. Las CTA convocaron a un paro el 30 de abril y se sumarán al anunciado por la CGT el 6 d abril. Mantienen el pedido de paritarias por encima del 17% planteado por el gobierno nacional y por Weretilneck.
Algunos datos. El ministro de Trabajo de la Nación, Jorge Triaca, avaló la paritaria de Comercio que cerró con aumentos por el 20% más cláusula gatillo. Y el Banco Central mantiene en 24% la tasa de las Lebacs, cimentado en la expectativa inflacionaria para 2017. Se corrió el techo. ¿Se modificará también en Río Negro?.
En medio de este debate la política partidaria sigue su curso. Este es un año electoral, y todos juegan. El oficialismo rionegrino quiere ganar en octubre para sustentar la continuidad del proyecto provincial en 2019. Todavía no definió candidatos y es posible que eso lleve tiempo. En la Casa de Gobierno estirarán los plazos lo más que se pueda, esperando definiciones en el escenario nacional. Mientras tanto participará en otras elecciones. En abril compite en Catriel en las convencionales constituyentes. Y en mayo, presenta lista en Maquinchao y Jacobacci donde se definen concejales.
Arriesga poco. La misma estrategia que en 2015. Equipo que gana no se toca. Weretilneck monitorea encuestas. Ninguna es favorable al gobierno nacional. Y sabe que es un riesgo «pegarse» al macrismo que no hace pie en Río Negro. Tampoco se puede alejar. Por ahora no tirará piedras a la Casa Rosada, la dependencia económica con Nación es grande. Y espera el aval de Hacienda para emitir el bono en dólares para financiar el Plan Castello. Y espera para armar su propio escenario electoral.
Mantiene el eslogan de la defensa de los intereses de los rionegrinos, pero teme una polarización. Si Cristina Fernández de Kirchner es candidata en provincia de Buenos Aires, pocos espacios de la ancha avenida del medio quedarán en pie. Corren riesgo Sergio Massa y Margarita Stolbizer. También los partidos provinciales.
El Frente para la Victoria lo sabe. Y juega al desgaste político de Cambiemos y el «efecto arrastre» que eso pueda tener en JSRN. El presidente del PJ ya se garantizó el acompañamiento del massismo rionegrino. Ahora debe cerrar con el kirchnerismo que le criticó la foto con Massa. Sufre embates del Frente Ciudadano, de Kausa Peronista, el Movimiento Evita y del sector que lidera el diputado Martín Doñate que, como contracara, trae a Bariloche al ex ministro de economía Axel Kicillof. Todo indica que habrá PASO.
Igualmente, no se descarta que el acompañante de fórumla de María Emilia Soria sea alguien identificado con el campo nacional y popual. Un puesto nada despreciable si se proyecta la candidatura en 2019 a intendenta de Roca de la actual diputada.
Pero todo indica que la disputa en el PJ comenzará en 2018. Soria aspira a convertirse en el gran ganador de octubre para que eso le allane el camino a la gobernación. ¿Y si pierde?. Tendrá varios competidores.
Por eso Weretilneck fortalece la figura de Alejandro Palmieri. Sabe que si Soria se sienta en su poder territorial, la diferencia podría ser difícil de descontar. Así el gobernador armó su candidatura. Contaba con una diferencia abrumadora en Cipolletti, que le daba un handicap de 19 mil votos. Las cuentas le deban un triunfo ajustado. No contó con el apoyo del kirchnerimo inorgánico que no acompañó a Miguel Pichetto, y eso convirtió su victoria en un resultado arrollador.
En consecuencia, no puede desproteger Roca. Necesita dividir el voto. Pero… ¿quién concentra ese voto k?. Hoy está disperso pero acompañará -como lo hace desde 2003- a la oferta electoral que mejor represente la crítica al macrismo y el sentir kirchnerista.
La situación de Cambiemos no es la más cómoda. Puede repuntar si se polariza la elección. Pero el armado rionegrino viene flojo. Todavía está pendiente la intervención nacional al PRO y el condicionado respaldo de la UCR que quiere conducir el proceso (liderar la lista) en octubre. Y lidear también con el sector del radicalismo aliado a Weretilneck.
Por ahora hay tres lista en competencia: JSRN, FPV y Cambiemos. ¿Jugará Magdalena Odarda?. Todo indica que el Frente Progresista presentará candidatos. La Senadora mantiene su fidelidad política con Elisa Carrió, pero está alejada del macrismo en Río Negro al que acusa de ser aliado del magnate inglés Joe Lewis.
La puja salarial volcó a los gremios a la calle. Solo en marzo hubieron cuatro movilizaciones multitudinarias que se convirtieron en un piquete antimacrista que dan aire a la oposición política: la de la CGT, los docentes al Congreso, la marcha federal educativa y la del 24 a Plaza de Mayo. Aún resta el paro nacional de las CTA y el de la CGT.
Mauricio Macri comienza a perder capacidad de diálogo con algunos gremios. Quien lo advirtió fue Hugo Moyano que ya propicia un cambio en el Triunvirato de la CGT. La decisión la tomó luego del reclamo de las bases para que pongan fecha del paro nacional. «Perdieron el control de la calle y el palco» razonan cerca del camionero, «perdieron la legitimidad de conducción. ¿Será un Moyano el nuevo líder de la central obrera?.
El gobierno nacional también pierde otras bases de sustentación. Muchos de sus votantes convocados por el cambio, ya critican la situación económica y la pérdida de empleo. La UCA, un aliado del macrismo en la oposició al gobierno de CFK alienta las encuesta de pobreza. La última expresión pública fue favorable al kirchnerismo. Las críticas además alcanzan casos de incompatibilidades y denuncias de corrupción. Los casos del Correo Argentino, Avianca, Odebretch y la obra pública sin licitación a amigos y familares lo lesionaron. Tampoco ayudan sus últimas apariciones públicas y sus discursos.
Para colmo, decidió irse a Holanda el 24 de marzo. Después de retroceder en la determinación del feriado del Día de la Memoria, no hubieron actos oficiales y sus diputados y senadores tuvieron en gesto de provocación innecesario. Se fotografiaron con un carteles que decían: «Los DDH no tienen dueño», «Nunca más a los negocios de los DDHH» y «Nunca más a la interrupción del orden democrático».
En Río Negro tampoco hubieron actos oficiales. Ni presencia de funcionarios en las Plazas. Y la torpeza llevó a vallar y custodiar con un centener de policías la Comisaría Cuarta de Cipolletti, que se iba señalizar como centro de detención clandestino, una actividad que se realizó en diferentes sitios de la provincia y el país sin inconvenientes.
Termina marzo. Se viene un abril cargado.