Preocupa a Nación la ejecución de fondos en Río Negro
(ADN).- En los últimos meses se intensificó la queja de funcionarios nacionales por los inconvenientes que existen para la ejecución de fondos en Río Negro que provienen de las arcas federales. Ello -según plantean- frena la posibilidad de desarrollar programas, capacitaciones y ayuda directa a beneficiarios.
El reclamo va sorteando instancias. Ya superó a los referentes rionegrinos de Cambiemos, y ahora circula por los despachos ministeriales de Buenos Aires.
Uno de los conflictos más notorios es la obra pública, fundamentalmente en viviendas. Desde que asumió Mauricio Macri, la Presidencia cambió la forma de gestión. Dejó de lado la preferencia por los intendentes y avanzó en una relación institucional con los gobernadores.
Pero en Río Negro la fluidez está tabicada por el FUCO (Fondo Unificado de Cuentas Oficiales), una herramienta que le permite a la provincia -entre otras cosas- equilibrio fiscal. Las fuentes nacionales que tomaron contacto con esta agencia aseguran que el Gobierno de Weretilneck «utiliza» el dinero que Nación «baja» para «evitar el rojo».
Traducido: los fondos nacionales llegan y se inmovilizan en cuentas provinciales. Cada vez que el agente financiero (Banco Patagonia) genera el balance, toma todas cuentas bajo la órbita oficial. Así, sumando el dinero federal, la provincia puede mostrar equilibrio, de otro modo, aseguran los funcionarios macristas, «el rojo sería permanente».
El problema es que para que Río Negro muestre cuentas equilibradas, se toma de dinero que está destinado a programas laborales, de capacitación, de fomento, y de ayuda directa a beneficiarios a través de los organismos públicos nacionales.
En consecuencia, se retrasa la ejecución de esas tareas, incluso de la obra pública.