¿Disponibilidad? Empleada estatal alega incertidumbre laboral y situación indigna
Cipolletti/Fernández Oro (ADN).- La Justicia provincial analizó el amparo que presentó una empleada estatal que solicitó ante el Ministerio de Economía y la Secretaría General de Río Negro que se la reintegre en el cargo de planta permanente y determine destino laboral definitivo -lugar de trabajo- del que fue relevada sin causa, según propios argumentos. Aún cuando sigue cobrando sueldo, considera que su situación de incertidumbre laboral resulta indigna, desde hace cuatro meses.
La agente estatal ha sido reintegrada provisoriamente a su lugar de trabajo en virtud de una medida cautelar dictada el 31 de mayo dictada por la Cámara Laboral de Cipolletti, pero aún así ella sostiene su disconformidad.
La empleada pública describió que ingresó a trabajar en el año 2005 y quedó incorporada el 5 de febrero de 201, según decreto 1243, a la planta permanente de la administración pública provincial, en el escalafón administrativo. Luego, pasó al escalafón profesional, continuando sus tareas en la Secretaría de Estado de Gestión y Control de Empresas Públicas, con sede en Fernández Oro.
Detalló que, mediante la resolución 023/2011, se le asignó como lugar de trabajo la receptoría de la Dirección General de Rentas en Fernández Oro, a partir del 15 de febrero del 2011.
Relató que al asumir las nuevas autoridades provinciales se disolvió la Secretaría de Empresas Públicas, la que pasó a depender de la Secretaría General de la Provincia.
Dijo haber sido intimada el 29 de febrero de 2012 a que se presente a trabajar en la Secretaría General, en Viedma, a partir del 28 de febrero, bajo apercibimiento de iniciar acciones administrativas y que luego de un intercambio epistolar, “no recibió respuesta alguna de ninguno de los organismos involucrados, encontrándose sin prestar tareas efectivas y percibiendo su salario situación indigna para sus valores personales”.
Por eso, había solicitado que hasta tanto se resuelva el amparo, se dicte medida innovativa consistente en su restitución a las tareas que prestaba en la Delegación de Rentas de Fernández Oro. Aún cuando sigue cobrando sueldo, considera que su situación de incertidumbre laboral resulta indigna.
Desde la Fiscalía de Estado se sustentó queen este caso “no se halla en juego la estabilidad del empleado público, ni tampoco se ha acreditado esta supuesta falencia”y que “ha sido reintegrada provisoriamente al lugar de trabajo en virtud de la medida cautelar decretada” por la Cámara Laboral cipoleña. (ADN)