En retirada…
(Por Oscar Muños*).- Éxodos, renunciamientos, despedidas, abandonos y retiradas. Cinco conceptos que denotan, en término generales, la idea que, por decisión propia o por circunstancias ajenas a nuestra voluntad, el momento de irnos ha llegado.
El benemérito General Manuel Belgrano, creador de la enseña patria, decidió el recordado «Éxodo Jujeño». Fue parte de su táctica militar para poder «enfrentar» a un enemigo mucho más poderoso sin exponer sus fuerzas diezmadas a una derrota indigna. La acción concreta consistió en llevarse animales, alimentos y quemar todo; dejar tierra yerma a los enemigos de la Patria.
El 22 de agosto de 1.951, una multitudinaria concentración de la clase trabajadora desbordó la Plaza de Mayo para pedirle a Eva Duarte que sea candidata a Vicepresidenta acompañando a Perón para las elecciones del año siguiente. A los pocos días Evita le explica a su pueblo, por cadena nacional, los motivos de su renuncia, hecho conocido como «el renunciamiento histórico»: «…No tenía entonces, ni tengo en estos momentos, más que una sola ambición, una sola y gran ambición personal: que de mí se diga… que hubo al lado de Perón una mujer que se dedicó a llevar al presidente las esperanzas del pueblo…»
Aunque Carlos Saúl Menem haya expresado, parafraseando a Evita, «renuncio a los honores pero no a la lucha» en un intento por querer emular aquel renunciamiento de 1.951, quedará en la historia como un abandono. Fue en 2003. Menem había triunfado en la primera vuelta por algo más de 2 puntos por sobre Néstor Carlos Kirchner. La presidencia de la Nación debía resolverse en la segunda vuelta. Pero Menem abandonó, defraudando a sus votantes, dejando un presidente supuestamente «débil» y a la democracia herida.
El 9 de diciembre de 2015 la primera mujer electa Presidenta de la Argentina por dos periodos consecutivos, Cristina Fernández, se despidió de su pueblo en un hecho inédito en la historia de nuestro país. De frente una Plaza de Mayo multitudinaria, la ex –Presidenta manifestó: «Podemos mirar a los ojos a todos los argentinos…yo espero que dentro de cuatro años, quien tiene la responsabilidad de conducir los destinos de la Patria, pueda frente a una plaza como esta decirle a todos los argentinos que también puede mirarlos a los ojos…»
Sin la más mínima pretensión de querer comparar hechos ni mucho menos protagonistas, el sexto Gobernador de Río Negro desde la recuperación de la democracia (1.983), Alberto Weretilneck, está en retirada. Aún le falta año y medio largo de mandato pero ya está en retirada.
Las retiradas, en su gran mayoría, suelen ser por obligación más que por decisión. Y este es el caso que nos ocupa. Weretilneck debe retirarse de la Primera Magistratura de Río Negro por imposición del Artículo 175 de la Constitución Provincial.
En función de ello, opino, el gobernador Weretilneck decidió construir su precipitada retirada, en base a una estrategia que consiste en asegurarse el mayor control del espacio político e institucional que le sea posible, mantenerse en el centro de las decisiones y horadar las posibilidades, cada vez más reales, de tener que enfrentar un futuro adverso. Definida la estrategia, el Gobernador comenzó a desplegar las primeras armas que considera más leales y en consecuencia, más efectivas. Con el tiempo se verá la efectividad, sobre todo si se tiene en cuenta que este tipo de lealtades suelen ser bastante volátiles.
En este contexto es posible encontrarle razonabilidad a la determinación en la que está empeñado el Gobernador, es decir la decisión de conformar una especie de línea defensiva que le cubra la retirada: la designación de Mario Altuna (diciembre de 2017), que pasó, casi sin solución de continuidad, de ser Jefe de la Policía de Río Negro a Juez del Tribunal de Impugnación; la de Fabián Gatti (22/03/18), otro ex-Jefe de la Policía, integrante de la Mesa Directiva JSRN y primer candidato a diputado nacional por el partido de gobierno en las últimas elecciones, nombrado Fiscal de Investigaciones Administrativas de la Provincia; la posible nominación (ya adelantada por el Gobernador) del actual Ministro de Seguridad y Justicia, Gastón Pérez Esteban, como Fiscal General de la Provincia, no nos dejan un amplio margen para las interpretaciones, más bien todo lo contrario.
Solo a modo de ejemplo y de acuerdo a lo establecido en las leyes vigentes, al Juez Altuna le compete, como integrante del Tribunal de Impugnación, revisar las sentencias emitidas por los Tribunales en los juicios penales (Ley nº 5020); el recientemente nombrado Fiscal de Investigaciones Administrativas, Fabián Gatti, tendrá entre sus funciones, nada más ni nada menos, que la de intervenir directamente de oficio y/o a solicitud del Tribunal de Cuentas en la investigación de conductas administrativas de funcionarios y agentes de la Administracióńn Pública Provincial de los tres poderes, entes descentralizados, entes autárquicos, empresas y sociedades del Estado o controladas por este (Ley 2394); y en el caso que el actual Ministro de Seguridad y Justicia Gastón Pérez Esteban, acceda al cargo de Fiscal General, tendrá a su cargo la coordinación y supervisión la tarea de los Fiscales de Cámara y de los Agentes Fiscales de la provincia, es decir de quienes tienen a cargo todas las investigaciones (Ley 4199). En conclusión, existe la posibilidad de que quiénes formaron parte del gobierno dispongan no solo de la posibilidad de ordenar qué investigar o no, de supervisar lo que se está investigando y de última, de incidir en caso de revisión de alguna sentencia.
Otro instrumento no menos importante, en el despliegue estratégico del Gobernador, es la posibilidad, según trascendidos no desmentidos, de echar mano a la sanción de «artilugios legales», con el único objetivo de impedir que Martín Soria sea el próximo gobernador. Léase ley de «Balotaje» para nuestra provincia. Sin eufemismos, se trata aquí, de violentar la Constitución Provincial.
La democracia no soporta éxodos, ni mucho menos tierra arrasada, tampoco admite abandonos; sí se merece renunciamientos y despedidas e incluso retiradas, siempre y cuando nos leguen una sociedad más justa y una calidad institucional de «alta intensidad».
*Vicepresiente Frente Grande Río Negro