Paro provincial: «no nos sentimos aludidos»
(ADN).- Alberto Weretilneck se puso el traje de teflón ante el reclamo gremial del martes. A pesar de haber sido un paro provincial, con marcha (de unas 12 mil personas) en Viedma, dijo: “no nos sentimos aludidos. Ninguna de las cosas que se dijeron nos contempla a nosotros porque no estamos haciendo ningún ajuste”.
Las declaraciones del mandatario se produjeron después del acto que compartió con el intendente Luis Ojeda en San Antonio, donde entregó los aportes del Plan Castello.
“Pensamos esto porque los trabajadores no son variable de ajuste de nuestro gobierno, porque estamos defendiendo el empleo, porque tenemos la obra pública en marcha y porque no hemos cortado ningún plan social”, detalló.
Sin embargo, el documento que firmaron los gremios nucleados en la CGT, las dos CTA y la CTEP, focalizaron responsabilidades de Weretilneck y le exigieron «que se ponga la camiseta de Río Negro, nos defienda». “Que el gobierno provincial que no se haga el distraído, también le reclamamos a él” expresó el líder de la UOCRA, Damián Miler, quien criticó la merma en la obra pública y la consecuente caída del empleo: “El Plan Castello es apenas una curita para una herida de 30 centímetros”, ejemplificó.
Pero la respuesta del mandatario fue: “Si por dialogar con el gobierno nacional nos tildan de esta manera, bueno, que lo hagan. Es que no tenemos otra forma de relacionarnos con el gobierno nacional”. “Nosotros tenemos que gestionar todos los días, y gestionar significa negociación-agregó- Y la negociación tiene un arma fundamental que es el diálogo. Si no hay diálogo no hay negociación y no se pueden resolver los problemas de los rionegrinos”.
En ese contexto, enumeró que “podríamos hacer comunicados de prensa en contra, presentar recursos judiciales, hacer manifestaciones. Pero eso no resolvería los problemas que tenemos como rionegrinos” consideró.
Además, insistió con que “siempre voy a preferir la mesa de la negociación porque es allí donde encontramos las soluciones. Que a veces nos dejan totalmente conformes y otras no tanto. Pero no hay otra manera en democracia, y en un país federal en crisis como éste, que no sea ésa, la de dialogar”.