Comienza a jugar el nombre de Roberto Lavagna
(Marcelo Trovato*-Urgente24).- Seis procesamientos la hacen dudar: ella debe tener fueros de alguna manera o bien negociar impunidad.
Ambos lados de la grieta se la están ofreciendo, uno para que se presente como candidata a Presidente, el otro para que apoye desde el llano.
No obstante la dinámica del deterioro económico acelera cada vez a mayor velocidad el malhumor de unos y otros votantes, los que celebran el fracaso de Cambiemos -hoy ya solo PRO- y los que se decepcionaron por una gestión definitivamente muy mala.
El que mejor mide por el lado del Peronismo es, sin duda, Roberto Lavagna, y tiene mucho menor imagen negativa que CFK y Mauricio Macri, pero tal como ya sostuvimos en anteriores editoriales, sin explosión previa no habrá candidato de transición por tan solo cuatro años.
Es aquí donde el operativo clamor ingresa a la cancha y son varios los jugadores que empiezan a jugar en ese sentido, desde la política hasta bancos como el JP Morgan y Bank Of América que, ante el pronóstico de Mauricio Macri de la semana pasada asegurándoles «quédense tranquilos que me voy a presentar y hasta gane en primera vuelta», salieron horrorizados sobre la base que hasta la fecha él no ha logrado acertar ningún pronóstico político y mucho menos económico, hecho que obligó a Gustavo Lopetegui a parar los Programas PPP, porque más dinero no habrá, le contestaron.
Por supuesto que los jugadores locales también suman su granito de arena para el Operativo Clamor Lavagna Presidente, desde la Unión Industrial Argentina, diferentes cámaras y empresarios del sector automotriz con más noche que la Luna.
En la negociación de fuerzas, aparece Malena Galmarini como candidata a vicepresidente, una manera de posicionar a Sergio Massa, que tampoco mide bien, pero tendrá cuatro años para mejorarla.
Y como se fuera una profecía autocumplida, hasta el riesgo-país en camino a los 1.100 puntos juegan a favor del Operativo Clamor. Pero aquí está, tal vez, el mayor jugador que tiene a favor la fórmula Lavagna – Galmarini: el mercado que no está esperando siquiera a que termine 2018 para emprender la salida de todo activo argentino con probabilidad de no pago y/o depreciación en términos de dólar.
Tampoco es casual que tengamos un diciembre tranquilo y sin saqueos. Nadie quiere ser tildado de golpista cuando, en realidad, ésta gestión se cae por sus propios errores. Este Gobierno está terminado, no haría falta esperar hasta 2019 si algunos trasnochados quisieran darle un empujoncito: se cae en cuestión de horas. Pero, por suerte, prima la cordura y el respeto por los tiempos democráticos.
Y justamente esos tiempos son los que, a diferencia de lo que opinan muchos, le van a jugar cada vez más en contra al oficialismo.
No queremos aburrirlos con el desagregado del balance del BCRA, la base monetaria existente, las Leliqs, los intereses a pagar de éstas y por la deuda asumida pre FMI. Pero una vez evaluadas, no queda ninguna duda acerca que la recuperación económica en 2019 es una utopía, aunque dupliquemos la cosecha agrícola. No hay chances de un salida en V, tampoco una salida en U, sino que nos depara es una larga L cuya parte inferior no será menor a los tres años.
La recesión llegó para quedarse por mucho tiempo, pero ese sería el menor de los males sino tuviéramos por delante la Estanflación primero y la HiperInflación después, para culminar con una reestructuración de deuda y un nuevo waiver por no menos de cinco años con el FMI.
Este Gobierno no les va a imponer de forma compulsiva un bono a los bancos para reemplazar la Leliqs, sino que va a emitir y tratará de absorber los pesos vía tasa, intentando mantener el tipo de cambio artificial y desquiciadamente bajo, como para que la inmensa masa de plazo fijo que no están destinados para capital de trabajo no fuguen al dólar previo a las PASO. Y de esta estrategia se desprenden una vez más varios errores de diagnóstico.
No están contemplando la coyuntura mundial sumamente adversa para los mercados emergentes los próximos años.
Subestiman la memoria inmunológica del inversor de plazo fijo: a mayor tasa, más rápido irán en búsqueda de un dólar barato.
Y si decidieran finalmente reeditar un Plan Bonex para los bancos y permitirles usarlos como encaje, la tasa al público caería de manera drástica y generaría la corrida cambiaria con mayor velocidad.
La versión más leve del fracaso de un Plan de Contingencia como el actual fue paradójicamente la del 2001, el tipo de cambio subió cuatro veces, desde $1 a $4, y luego que justamente Lavagna manifestara el «no emito más» cayó a la banda de $2,80 – $3,20.
Las demás fueron de hasta 17 veces, 1.746% se devaluó nuestra moneda con la salida de la Tablita de José Alfredo Martinez de Hoz y con la salida de Plan Primavera de Juan Vital Sourrouille el Austral fue primero de 80 a 200 y finalmente llegó a los 10.000, lo que a posteriori se tradujo en el Plan de Convertibilidad restándole cuatro ceros al Austral y volviendo al tristemente célebre $1 = US$ 1.
Como si no alcanzara la incertidumbre económica, habrá nuevas figuras que harán mas difícil atravesar 2019, entre las izquierdas, los Olmedo, Espert, quizá haya un 15% para restarle a vaya a saber uno qué candidato.
E insistimos que la frase «cuestiones de salud» está dentro del cuaderno de Jaime Durán Barba si las mediciones en serio no mejoran, y lo mas probable es que de la mano de los concursos, quiebras, desempleo, caída de la actividad, inflación, suba de impuestos y tarifas, crecimiento del índice de pobreza suceda lo contrario.
Si habrá «cuestiones de salud» nos daremos cuenta apenas la gobernadora decida anticipar las elecciones de Provincia de Buenos Aires, el desgaste solo puede reemplazarse por la carismática Maria Eugenia Vidal si desean mantenerse en la Casa Rosada cuatro años más.
A partir de febrero, cuando el dinero vuelva al sistema, comiencen las clases y Argentina se ponga en modo «ON», primero sufriremos las consecuencias de las dos herencias recibidas, la del Kirchnerismo y la del Macrismo, luego será el momento de mayor climax del Operativo Clamor.
*Analista de mercados. Fundador y Manager de Pronóstico Bursátil.