«Fue muy impactante ver cómo quedó el submarino»
(ADN).- Miguel Toconás, hermano de Mario, uno de los 44 tripulantes del Ara San Juan, hizo una fuerte crítica al accionar de la justicia y la Armada. También relató las imágenes que vio -junto a otros familiares- en la videoconferencia que reveló cómo está el submarino en el fondo del mar.
«Fue muy impactante para nosotros ver cómo quedó el submarino» aseguró Miguel. En diálogo con Digamos Todo en FM El Rayo, relató: «vimos la apertura de la parte de popa a la altura de la hélice… piezas dispersas del submarino, ropa, bolsos, cadenas». Es por ello que evaluó que «los cuerpos tienen que estar del otro lado, en la proa».
Toconás se quejó porque la jueza no les permitió formular preguntas y quedaron muchas dudas después de las imágenes.
En ese momento, Marta Yáñez (magistrada federal de Caleta Olivia) su secretario, el jefe de la base de Mar del Plata y personal de la policía federal -que se encontraban en la transmisión- «tenía los micrófonos abiertos y se reían» dijo Miguel. «Nos dolió mucho».
«La jueza está lenta, del lado de ellos, en contra nuestra y quiere hacer pasar esto como un accidente y no una negligencia» aseguró Toconás.
Miguel, subrayó: «le exigimos al gobierno y a la Armada que esto no vuelva a suceder, que nunca más se dejen de reparar las maquinarias para evitar estas tragedias. Varias veces lo alertamos pero hicieron caso omiso», aseguró.
«La Armada es un lugar muy reservado, por ahí (sus integrantes) no te decían como estaban las condiciones del submarino, pero había indicios» indicó, pero contó que «Mario iba anotando todo en cuaderno que después trasladaba a su computadora después del accidente accedimos a esa información. Ahí vimos los problemas del periscopio, el ingreso de agua, las máscaras de respiración…».
Y agregó: «Todos los familiares nos pusimos a buscar información, los tripulantes tienen la costumbre de llevar un registro. Eso fuimos encontrando y eso está saliendo a la luz».
Por último, Toconás expresó: «Queremos llegar a ellos, sacarlos y enterrarlos, tener un lugar donde ir a llorar».