El edificio de la Cancillería en alquiler para eventos
El emblemático Palacio San Martín, tradicional sede de la Cancillería argentina se alquila -según se publicó en el Boletín Oficial- y se estima que de esta manera ingresarán recursos económicos.
La resolución 330/2019 indica que el majestuoso edificio del Ministerio de Relaciones Exteriores y Culto puede ser alquilado y se ofrece un total de 38 salones divididos en las tres casas y la torre que conforman el Palacio. Según La Nación, los salones costarán desde los $12.000 en el Seguí en la Casa I hasta los $196.000 que cuesta el auditorio Manuel Belgrano, ubicado en la torre de la Cancillería.
Según la publicación del Boletín Oficial no se alquilarán estas dependencias para eventos político partidarios, ni casamientos, cumpleaños, comuniones. Se alquilarán para actividades relacionadas a la realización de producciones audiovisuales, así como eventos, reuniones, exposiciones, conferencias, actos culturales y capacitaciones.
El espacio más caro de la «Casa II» es el Salón Libertador, con un valor de alquiler de $130.000. Lo siguen una terraza a $55.000, y el Salón Amarillo, que cuesta $49.000. En la «Casa III», en tanto, el salón más caro asciende a $185.000 por día, mientras que la torre de Cancillería tiene los precios más elevados: la Plaza Seca, que es el acceso al foyer y al auditorio, valuado en $97.000; el foyer mismo, valuado en $114.000 y el auditorio Manuel Belgrano, con un costo de alquiler de $196.000.
El gobierno de Mauricio Macri reconoce que toma la decisión de alquilar el Ministerio por la crisis y que busca «en forma creativa» conseguir fondos: «Que los costos derivados de la conservación, mantenimiento y puesta en valor del PALACIO SAN MARTÍN, así como aquellos inherentes a su puesta en funcionamiento para eventos, se incrementan en forma proporcional a la antigüedad del monumento, excediendo las posibilidades presupuestarias del Ministerio. Que, en consecuencia, resulta necesario articular en forma creativa los recursos que deben afectarse en forma específica para tal fin, arancelando el uso de los espacios disponibles».