Pastorales preocupadas por situación de cárceles rionegrinas
Viedma / Bariloche.- Miembros de distintas pastorales penitenciarias de Río Negro hicieron pública su profunda preocupación sobre la situación de la Justicia Penal y las cárceles de la Provincia y solicitaron al Poder Provincial de respuestas al corto plazo “a esta angustiante e insostenible situación, y no que debamos lamentar pérdidas irreparables”.
En un documento destacaron “las pésimas condiciones actuales de los penales, los cuales no permiten un proceso de rehabilitación e inserción en la sociedad, sufriendo esta discriminación tanto el preso como sus familiares. Las cárceles parecen ser lugares de depósito humano y venganza donde están encerrados, estigmatizados y olvidados no cualquier ciudadano que delinque, sino los que provienen de ambientes empobrecidos”.
“Las falencias que vemos son muchas, la mala alimentación, la escasa atención de la salud, educación, trabajo y capacitación labora. Los edificios deteriorados e insuficientes para albergar el número de internos/as y separar encausados de condenados, la ausencia de un gabinete técnico criminológico (en San Carlos de Bariloche), o su mal funcionamiento en otros casos. Todo conspira para que no se lleve a cabo el proceso de re inserción que piden las leyes. Aunque se están dando pequeños pasos para cambiar la situación, sobre todo en Viedma, no alcanza para solucionar la problemática de la provincia”, agregaron.
Si hablamos sobre las condiciones de encierro para mujeres, la situación generalmente es peor, pues se agravan las carencias y se desatienden sus necesidades específicas de género. Este abandono se nota además en la situación de las presas domiciliarias.
“A todo ello se suma la falta de selección y deficiente capacitación del personal penitenciario o policial, así como su indumentaria y condiciones laborales. También se puede mencionar el deficiente accionar del Instituto de Presos y Liberados (IAPL). Estos son algunos de los problemas que afectan cotidianamente la vida carcelaria desde hace muchos años, a pesar de los reclamos realizados y buenas intenciones expresadas, más en los discursos que en los hechos”.
“Creemos firmemente que cada ser humano, sin excepción y condición alguna, es hijo/a de Dios, y por ello, digno de respeto y de tener renovadas oportunidades de vida, incluso si no ha respetado la dignidad de otro”.
Por todo lo expuesto, solicitamos al Poder Provincial dé respuestas concisas al corto plazo a esta angustiante e insostenible situación, y no que debamos lamentar pérdidas irreparables.
De más está decir que las Pastorales Penitenciarias de la Provincia seguimos ofreciendo su capacidad y voluntad para ayudar al solucionar los problemas carcelarios que requieren decisiones efectivas del Ejecutivo, la Justicia y el esfuerzo de toda la sociedad para que las cárceles sean lo que están llamadas a ser, dijeron en un documento firmado por Pastoral Penitenciaria de San Carlos de Bariloche, de General Roca y Viedma.