Extraen almejas del río para vender en Buenos Aires
(ADN). – Un hecho insólito y nunca visto se produce en la costa viedmense, con la marea baja, en el banco de arena que cubre la ribera desde la zona del ministerio de Economía hasta el “Barco Hundido”. Un grupo de personas, pala en mano, extraen una especie de almeja, que un comerciante oriental, dueño de un supermercado chino de la calle Alvear, vende en Buenos Aires.
Quienes transitan habitualmente por la costanera, o los remeros que practican en el río, observan como se produce esta explotación del bivalvo conocido como Corbicula fluminea, una especie exótica proveniente de Asia, que no se sabe cómo se radicó en la zona.
Se desconoce de qué manera se produce esta explotación comercial -según pudo conocer ADN se vende mayorista a 120 pesos el kilo-, quién la autorizó, cómo intervinieron las autoridades municipales y provinciales con competencia en el tema y cuáles son los parámetros sanitarios para su traslado, ya que, en su propia valva y sumergidas en agua, pueden sobrevivir varios días.
A esta situación debe sumarse un problema de alteración del hábitat del banco de arena con la presencia de distintas aves que se alimentan en el sedimento, además de alterar la naturaleza del banco, donde hoy se observan pozos abiertos por la extracción del bivalvo y que pueden alterar la navegación junto al muelle de Viedma, por el movimiento de arena.
Se pueden ver entre dos y seis personas que cavan con marea baja y que juntan las almejas en bolsas y baldes, y que tienen abundantes cosechas, con la consiguiente preocupación por el cuidado del ecosistema del río y la costanera viedmense.
Corbicula fluminea
En el 2017 fue publicado un estudio de la UNRN, el CONICET y la UNLP, sobre este bivalvo invasor, proveniente de Asia.
Señala este trabajo que, por su interacción con el ambiente invadido, se lo denomina “ingeniero de ecosistemas” debido a que altera la estructura y funcionamiento del ecosistema receptor, afectando las condiciones abióticas y bióticas.
Esta investigación tuvo como objetivo evaluar el estado de avance de la invasión de Corbicula fluminea en el río Limay, en Río Negro, y los impactos relacionados con su presencia.
Se realizó un muestreo exploratorio previo y se determinó un avance de aproximadamente 170 km aguas arriba en el río Limay desde su último reporte en 2005 en la confluencia de ríos Limay y Neuquén.