«Cosas vederes, amigo Sancho…». ADN
“Cosas vederes, amigo Sancho que faram hablar las piedras”, es una frase que se adjudica al Quijote, de Miguel Cervantes, para referirse a las sorpresas que puede deparar la conducta humana. En realidad, la referencia figura en el Cantar del Mío Cid, en un diálogo con el Rey Alfonso VI.
Sin dudas fue sorpresa el acuerdo de Ariel Rivero con Javier Milei, que también hará hablar a las piedras. El intendente de Campo Grande, de reconocida trayectoria en el peronismo, que llegó por el PJ a cumplir funciones de vicegobernación en la transición provincial post muerte de Carlos Soria, viró al liberalismo siguiendo los pasos de su viejo amigo en el justicialismo Miguel Pichetto, que de ser candidato del Frente para la Victoria en Río Negro pasó a convertirse en compañero de fórmula de Mauricio Macri.
Será tema para investigaciones, sociólogos e historiadores, cómo desde los dos partidos populares tradicionales del país como el radicalismo y peronismo, se abastece -como un semillero- a los partidos liberales. Un pase de verónica y una voltereta de 180 grados para caer en el lado opuesto político e ideológico.
Rivero, en su proyecto de construcción de poder en Río Negro, optó por el pragmatismo y eligió una opción que le ofrezca apoyo nacional a su candidatura a la provincia (léase aporte económico de campaña) y al tiempo que se reserva una eventual candidatura legislativa nacional para las elecciones de octubre. Este proyecto sólo es posible -en una carambola a dos bandas- con el apoyo del líder de Libertad Avanza, Javier Milei.
“Cosas vederes amigo Sancho”. La sorpresa también se encuentra en la consideración que tienen los rionegrinos de Javier Milei. El analista y encuestador Ricardo Vignoni reveló que el candidato a presidente libertario tiene una imagen positiva en la provincia de 23 puntos, frente a Cristina Fernández de Kirchner, de 26 puntos; 19 de Sergio Massa; 17 de Mauricio Macri y 15 de Horacio Rodríguez Larreta.
Vignoni se pregunta: ¿Qué pasa con estos números si se trasladan a nivel nacional? Y plantea la sospecha de que la elección presidencial pueda estar complicada, en referencia a las posibilidades de alianzas que se generarían en una segunda vuelta electoral.
Estos números que acompañan la imagen de Milei tiene al voto femenino como sustento. En Viedma, por ejemplo, sorprende.
También las encuestas ponen en alerta el descreimiento del votante a la política y su dirigencia, incluso es notable como vecinos suman buenas imágenes, que no forman parte de ningún partido e incluso periodistas de radios locales.
Pero, a quién beneficia y a quién perjudica la candidatura del intendente de Campo Grande.
“Cosas vederes amigo Sancho”. Ariel Rivero le competirá el espacio de centro derecha a Aníbal Tortoriello. Digamos que es el mismo público que se manifiesta sobre todo anti kirchnerista, una posición que el intendente se encargó de remarcar. Habrá que conocer quiénes lo acompañarán en las listas a legisladores, pero fundamentalmente en los municipios donde el dirigente estrechó lazos, para armar el entramado territorial. La candidata o candidato a la vicegobernación, también sorprenderá.
El candidato de Primero Río Negro, con el apoyo de Milei, tiene experiencia y será una piedra en el zapato para la competencia electoral del espectro neoliberal, pero también tratará de chimanguear votos en el campo del peronismo, recurriendo a viejos amigos y al residual del pichetismo, pero pescará en el mismo estanque de Tortoriello, con un discurso señalado por el jefe de Libertad Avanza cuando critica a “los blandos” de Juntos por el Cambio, con especial preferencia hacia los radicales aliados al macrismo.
Todo es música placentera a los oídos de Juntos.
Rivero ve como debilidad, el discurso del ex intendente de Cipolletti, que “no convoca y que tiene dificultades en presentar a los dirigentes nacionales de JxC, con imágenes magras en Río Negro”.
Hasta ahora la campaña de Tortoriello se centra en críticas a Juntos Somos Río Negro y sobre todo en forma personal a Alberto Weretilneck y a los radicales que lo enfrentan y no lo apoyan, a quienes denunció, en un reportaje en Radio Raíces de Viedma, “como empleados a sueldo del gobierno “, mientras trata de reclutar a los peronistas enojados y apela al sentimiento rescatando la figura del ex gobernador Carlos Soria.
“Cosas vederes amigo Sancho”. Otro pase, de menos peso específico, fue la transferencia que hizo Claudio Thieck, del Frente Renovador, a las filas de Tortoriello, e incluso ya se lo menciona como probable candidato a intendente de Bariloche, por esa fuerza.
Thieck desde un principio tuvo un enfrentamiento con los legisladores Alejandro Ramos Mejía, Luis Albrieu y Nicolás Rochas, cuando se incorporaron al massismo y armó el FR Territorial (para diferenciarse de los legislativos) y organizó partidos municipales, con ese sello, incluso le ofreció una candidatura a diputado, por San Antonio Oeste, al presidente de la Cámara de Comercio e Industria de Río Negro, Walter Sequeira.
Desde el massismo nacional explicaron que Raúl Pérez, dirigente nacional de Massa le habría pedido a Thieck que “se encolumne” para terminar con esta pelea doméstica, una sugerencia que el ex delegado de la CNRT no acató y le pidieron que renuncia al cargo en la CNRT. Ya había iniciado sus contactos bilaterales. Se conoció que el periodista de Bariloche, Lionel Antúnez, dueño del portal MinutoUno y asesor de Tortoriello en la zona andina, habría acercado a Thieck al diputado nacional de JxC, donde se habría acordado su incorporación a Cambia Río Negro.
“Cosas vederes amigo Sancho” y hasta abril falta mucho.