Denuncian avance petrolero sobre tierras productivas
(ADN).- «En el Valle se está asistiendo a un avance sin precedentes de la actividad petrolífera sobre las tierras productivas, pero también sobre las rutas y caminos utilizados desde hace años por los fruticultores». La denuncia pública pertenece a Carlos Carrascós, productor cipoleño que adelantó un tractorazo para este jueves de chacareros autoconvocados.
La protesta se realizará en la Ruta 151, a la altura del santuario del Gauchito Gil y de la rotonda del tercer puente carretero entre Cipolletti y Neuquén. Según se informó, la movilización de tractores y maquinaria agrícola se realizará ante el «avasallamiento de la actividad frutícola por la industria petrolera y también por las dificultades económicas imperantes».
La actividad ha sido prevista para las 9, con participación de los pocos chacareros que van quedando en la ciudad y que se atreven a reclamar por sus derechos y por una mejora en las condiciones en que se desarrolla la fruticultura.
“Ya no se puede trabajar más” aseguró Carrascós, quien refirió lo «difícil, casi imposible» que les resulta a los productores “empezar a invertir en abril de este año para hacer la cosecha en enero-marzo de 2024, y luego terminar de cobrar por la fruta en 2025”.
El productor indicó que algunos sectores, en particular los políticos, se toman la realidad vigente como si fuera “una comedia, con sus idas y venidas, pero acá hay gente que trabaja todos los días, incluidos los sábados, domingos y feriados, mientras algunos se divierten”.
«En este cuadro de situación, que incluye el permanente problema del precio de la fruta, en el Valle se está asistiendo a un avance sin precedentes de la actividad petrolífera sobre las tierras productivas, pero también sobre las rutas y caminos utilizados desde hace años por los fruticultores» sentenció Carrascós, que calificó lo que está pasando como “la segunda Conquista del Desierto”, en la que se «eliminará a los productores y a gran parte de la fruticultura, como en el pasado ocurrió con los mapuches, en la primera Conquista del Desierto”.
Por eso, denunció “un avasallamiento de las zonas rurales”, en donde cada vez más se pueden observar emprendimientos vinculados a la industria petrolera, que se unen a la expansión de la actividad inmobiliaria y la construcción de viviendas.