Milei explotó contra Macri por la falta de fiscales
La bronca que venía acumulando Javier Milei por las promesas incumplidas de Macri estallaron este sábado cuando se enteró que la Cámara Nacional Electoral advirtió a los apoderados de la Libertad Avanza (LLA) que no habían presentado las boletas necesarias para enfrentar el balotaje del 19 de noviembre.
Se sumó a esa advertencia el escándalo interno que vive la Libertad Avanza por la falta de fondos para los fiscales. Milei está convencido que Guillermo Ferraro, el CEO a cargo de la fiscalización, se distrajo en el control de esos fondos.
Furioso, el libertario ordenó retirar la invitación para el debate de este domingo a todos los invitados del PRO y ocupar sus lugares con militantes de LLA. Como el recinto de la Facultad de Derecho de la UBA donde se realizará es bastante grande, la mesa chica de Milei tuvo que convocar hasta concejales del Conurbano, para llevar de apuro las butacas que quedaban vacías, confió a LPO una fuente al tanto de las discusiones.
El enojo de Milei no es caprichoso. La logística de las boletas junto a la fiscalización nacional de la elección son parte de las tareas que habían quedado a cargo de Macri, cuando Milei pactó su alianza con el ex presidente. Como reveló LPO en exclusiva, Macri habría prometido aportar 15 millones de dólares y su supuesta estructura nacional de fiscalización para enfrentar el ballotage.
Ya desde el día uno de vigencia de ese acuerdo, Macri demoraba el envío de fondos, necesarios por ejemplo para pagar los juegos de boletas que ahora le reclaman a Milei.
La fiscalización es otro pantano y vuelve a poner en foco las dudas que existen sobre que controla realmente el ex presidente de su supuesta fuerza política. «Macri no está en control, simula que es el jefe pero es poco lo que maneja», explicó a LPO un dirigente que se reunió con el ex presidente y para su sorpresa lo vio más interesado en avanzar en negocios con países árabes, que en la candidatura de Milei.
Macri en las charlas con Milei ofreció poner a su disposición la supuesta mega estructura de fiscales que armó Guillermo Dietrich. Sin embargo, fuentes del PRO confiaron a LPO que poco y nada queda de esa estructura de «voluntarios» que el ex ministro de Transporte armó para las elecciones de 2019, cuando Macri perdió su reelección. «Ya en el 2021 quedaba poquito, sin plata no hay forma de mantenerla», explicó a LPO la fuente consultada.
Con un agravante, Dietrich no tiene ningunas ganas de volver a la pelea política, según confiaron a este medio dos personas que hablaron en las últimas semanas con el ex ministro. «Evita decirle que no a Macri para no desairarlo, pero está corrido, las balas de la gestión le picaron cerca y quedó quemado», agregó la fuente.
En efecto, Dietrich observa con preocupación como la justicia avanza con causas muy delicadas de aspectos cuestionables de su gestión, como las concesiones que intentó meter a la fuerza en el puerto de Buenos Aires. Entre otras.
Como sea, Macri tampoco parece haberse tomado muy en serio la fiscalización o acaso le dio fiaca. Sus aportes fueron un poco desordenados, a la supuesta colaboración de Dietrich, se sumó una fugaz aparición de la ex diputada Paula Bertol y más recientemente el empresario Eduardo Batistta, como reveló LPO. El único que está participando de manera más o menos consistente es el senador José Torello, pero se desconoce que puede aportar en materia de fiscalización.
Este desorden cae directamente sobre las espaldas de Karina Milei, que además de hermana del candidato es su jefa de campaña y una de las pocas personas con acceso libre al candidato que desde la primera vuelta decidió recluirse en una suite del hotel Libertador de la avenida Córdoba.
En medio de ese caos, la fiscalización continúa formalmente a cargo de Ferraro, un ex CEO de KPMG que fue funcionario de Macri. Casi sin experiencia política comprobada y menos en una tarea tan específica como organizar una fiscalización nacional, su nombre genera enormes recelos en LLA. «Ferraro no podía no nos servía ni para llevar los papeles de una oficina a otra», se burló en diálogo con LPO un empresario que trabajó con este ejecutivo.