Hidrógeno verde: Chubut acelera y relega a Río Negro

(ADN).- El gobierno nacional está decidido a potenciar la matriz energética de la Argentina e incluyó, al desarrollo de las fuentes tradicionales, las generaciones limpias como el litio y el hidrógeno verde. De esta manera retoma una iniciativa que la administración de Alberto Fernández frenó, a pesar de anunciar un mega proyecto en la cumbre de Cambio Climático 2021 en Glasgow, Escocia.

La puerta que abrió Nación fue rápidamente tomada por la provincia de Chubut, que busca ampliar la producción de energía y ve en el hidrógeno el complemento del petróleo, para volver a pisar fuerte en el mercado interno tras el boom de Vaca Muerta. Además, imagina un esquema de exportación que genere ingresos de dólares genuinos, y sume regalías en tiempos de escasez financiera.

Hace unos días, el gobernador Ignacio Torres encabezó un Foro sobre «Transición Energética e Hidrógeno Verde», que reunió en la ciudad de Comodoro Rivadavia a funcionarios de las distintas provincias patagónicas, representantes de la Unión Europea y empresarios del sector energético, con el propósito de desarrollar una agenda de industrialización basada en la producción de energías limpias, como motor de crecimiento económico y sostenible de la Patagonia Austral.

Una acción similar ocurrió en Bariloche en mayo del 2023, impulsado por la ex gobernadora Arabela Carreras, pionera en el impuso político del desarrollo del hidrógeno verde en el país.

La iniciativa de Chubut provocó que el legislador de la CC-ARI, Fernando Frugoni, pidiera al gobierno de Alberto Weretilneck «tome en serio» la posibilidad que abrió el gobierno nacional a través de la ley de grandes inversiones incluida en la Ley Bases, «antes de que el emprendimiento se vaya a Chubut”. El alerta surge porque la empresa que iba a invertir en Río Negro, la australiana Fortescue, comenzó a explorar la adquisición de tierras en la vecina provincia.

El hidrógeno fue uno de los temas que ingresó en la interna del oficialismo provincial. Ello, sumado a la inacción del gobierno de Fernández, detuvo la marcha del proyecto que no logró siquiera, montar los molinos de viento en la Región Sur y Cerro Policía.

Ahora la producción de esa energía limpia tiene una nueva oportunidad. No solo por el impulso de la nueva ley, sino también porque una empresa clave, YPF, confirmó dos proyectos que van de la mano: el oleoducto Vaca Muerta Sur, y la exportación de GNL. Ambos con salida al mar (para exportación) por el puerto de Sierra Grande.

En esa localidad, Fortescue iba a montar la fábrica y el punto de exportación del hidrógeno verde. Y se complementaba con los iniciativas de la petrolera estatal argentina.

Atrás quedaron los debates sobre la convivencia de las producciones de combustibles fósiles y limpios: son complementarios, mientras se realiza la transición energética en el mundo. Una gran oportunidad para Río Negro, que comenzó liderando el proceso, y hoy está rezagada.

Ponerlo en marcha nuevamente, representaría además, la generación de puestos de trabajo, dinamizar la economía de la Región Sur y Sierra Grande, y aumentar los ingresos de la provincia que vienen menguados por la quita que hizo Nación de recursos coparticipables.