El plan de comunicación minero costará casi $23M
(ADN).- El gobierno de Río Negro está decidido a impulsar el desarrollo minero en la provincia. Fue uno de los temas destacados del discurso de asunción de Alberto Weretilneck en diciembre pasado, pero los avatares de la nueva realidad política obligaron a posponer varias iniciativas por la crisis económica a partir de los recortes de fondos de Nación. Sin embargo, la Ley Bases revivió algunos proyectos por el Régimen de Inversiones.
La minería es una fuente de riqueza pero está fuertemente cuestionada, especialmente en la Patagonia. Por eso, la administración Weretilneck no quiere correr riesgos como con la instalación de la planta nuclear. Así que ahora busca otra estrategia comunicacional que permita la licencia social para explorar y explotar los recursos (oro, plata, litio y algunos otros) minerales que posee Río Negro.
Para ello, a través de la Secretaría de Energía, contrató (sin licitación, de forma directa) a la consultora Zurban Córdoba por 22.990.000 pesos para que, en seis meses, realice una estrategia de comunicación, confeccione identidad gráfica y mida el impacto (encuestas) de los proyectos, según consta en el expediente.
Zurban Córdoba está ligada al consultor Mario Riorda, quien estuvo hace unos días en Viedma dando charlas a los integrantes del gobierno, legisladores y dirigentes de Juntos Somos Río Negro, de cómo encarar la «nueva etapa» de la gestión.
Esa intervención y «capacitación» habría sido abonada por Lotería de Río Negro, según informó el diario Río Negro, tras un pedido de informes al gobierno. Luego de la publicación, el jefe del bloque Vamos con Todos, José Luis Berros, pidió explicaciones.
El legislador roquense, también anunció que estudia acciones por la contratación de publicidad a una empresa «fantasma» ligada a un ex asesor del presidente Alberto Fernández y al grupo Indalo de C5N. El dato fue consignado por el diario Río Negro, y provocó malestar en diferentes medios de comunicación de la provincia que no reciben pauta oficial.
Estos gastos millonarios se contraponen con el discurso oficial sobre la estrechez financiera que expone el gobierno, por caso, en las paritarias con los gremios, cuando se debaten salarios; o en el conflicto de salud.