Cuarteles de invierno. ADN
El Gobierno concentra todas sus energías en la gestión, mientras la oposición ya está en modo electoral. La economía demora el cambio de fase y lo obliga a tener todos los sentidos puestos en la supervivencia, diseñando estrategias para administrar recursos cada vez escasos. La situación lejos está de ser coyuntural y, a pesar de las buenas noticias que llegan de los pozos de Vaca Muerta (en Campo Grande), los recursos propios todavía no equilibran las pérdidas por las quitas de Nación.
«La situación es grave». La frase que antes era administrada solo en algunas oficinas gubernamentales hoy se expande sin tapujos. Hay que juntar dinero para los sueldos y en pocos días comienza la colecta para los aguinaldos. Cambiará el formato del cronograma? Se estirará en el tiempo? Dudas que emergen entre los administradores. En este escenario los gremios estatales pujan por paritarias. Otros, como la UOCRA, solo ve engrosar la lista de desocupados sin que haya un solo atisbo de obra pública a la vista.
El sector que más preocupaciones conlleva es Salud. El desembarco de Thalasselis aplacó -en parte- las protestas en los hospitales pero sigue sin soluciones de fondo. Para colmo, el esquema de recomposición salarial (a través del aumento de guardias) generó una diferencia entre médicos y enfermeros, lo que aumentó la tensión con ATE y UPCN, que recoge allí su mayoría de afiliados del sector.
La convocatoria a médicos foráneos parece haber despertado interés. El gobernador Alberto Weretilneck celebró esta semana que más de 400 interesados ya acercaron el CV al Ministerio. Pero llegarían en este contexto de conflicto salarial y a una provincia en rojo, al menos así lo reportan los informes del Ministerio de Economía, cada vez que anuncia que se cae la recaudación. El combo de Salud, además, incluye el IPROSS que mantiene deudas con sus proveedores. Hay reclamos por meses de atraso. La administración prioriza pagos y esa decisión discrecional genera inconvenientes a quienes están al fondo de la pila de expedientes. ¿Hay cambios en la conducción? La repetición del rumor llamó la atención esta semana en Viedma.
Los problemas se multiplican y la sábana es corta. Por eso, Fabián Gatti se convenció del proyecto que ideó Weretilneck, que trabaja en sus detalles la legisladora Marcela Abdala. Emerge la Agencia de Turismo, un ente autárquico y con participación público-privada. Solo así podrá conservar algo de dinero para promoción y obras. Las urgencias hoy están en otras áreas. El diseño viene cosechando respaldos pero es un punto crítico en Bariloche, donde las reservas para este verano son escasas. Las políticas del gobierno nacional no ayudan, con un país caro en dólares. La clase media vuelve a Brasil, Chile, Uruguay o Europa y EEUU.
La caía de la actividad turística significa menores ingresos genuinos. La fruticultura ya no da los rindes de antaño a las arcas provinciales. El resto de la ruralidad crece pero no paga impuestos. La pesca, en crisis. La ciencia y la tecnología, que generaba exportaciones, dejaron de ser de interés para Nación. Y para que la minería y la energía den buenos resultados, todavía falta.
Encima, la rentabilidad petrolera ingresó en debate. Mainqué logró, al fin, que el Gobierno considere reformar la ley de coparticipación municipal, lo que generó ruido en Catriel. Weretilneck lo anunció en el aniversario del pueblo valletano y el debate también beneficia a Allen por producción gasífera. La intendenta Daniela Salzotto anunció su desacuerdo.
La reactivación económica apenas si se siente y el cepo saldrá de escena recién a fines del año próximo, lo que permitirá la llegada de las grandes inversiones. En consecuencia solo queda esperar una buena negociación con la Casa Rosada por el Presupuesto 2025. El proyecto primario ya viene con malas noticias para Río Negro: sin obra pública y con un recorte de 140.000 millones de pesos en fondos. El Gobernador volvió a dar una señal y otra vez jugó a favor en el Congreso, esta vez para blindar los DNU del Presidente, a cambio de obras y fondos. La experiencia indica que Nación no cumple. Ninguno de los acuerdos anteriores (Ley Bases, financiamiento universitario, etc.) fue honrado.
La gestión ocupa la agenda del oficialismo. Tanto, que no tiene estrategia para el 2025 y aún ni siquiera debate cómo encarar la campaña que será polarizada, donde la gente irá a votar a favor o en contra de Javier Milei. Lo único que surge con claridad es la postulación de Pedro Pesatti al senado. Por ahora, el vicegobernador es número puesto. Por debajo, se debaten otros nombres. Agustín Domingo y Bruno Pogliano están en la grilla de los diputados. Y en estas horas, el nombre de Gustavo Gennuso apreció motorizado desde Bariloche.
No es el único surgimiento inesperado. Miguel Pichetto fue propuesto por Roberto Vargas como senador por Río Negro. Al principio la idea fue diluida por el propio entorno del diputado, pero con el correr de las horas la iniciativa del dirigente gastronómico cobró asidero. «Miguel tiene partido» aseguran. Su postulación no sería por el peronismo, partido del que se fue cuando compartió fórmula presidencial con Mauricio Macri en 2019. Tampoco por Primero Río Negro, el armado de Ariel Rivero. ¿Explorará un entendimiento con Weretilneck? Esta semana compartieron el acto aniversario de Villa Regina, que sirvió de escenario para la reaparición de Pichetto en la provincia. Incluso, días después, salió a bancar a los intendentes imputados en la causa Techo Digno, criticó el proceso judicial, y aseguró «intencionalidad política» en la acusación. Por ahora, silencio.
La política se mueve pero el oficialismo prefiere no hacer olas, irse a cuarteles de inverno y desensillar hasta que aclare. Sólo habrá una oportunidad (ya no en el 2025, asumen) sino en el 2027, si el huracán Milei deja algo a su paso.
El Presidente sigue cosechando buena adhesión en Río Negro y según las proyecciones llegará a las elecciones con caudal como para competir por el primer puesto. Sólo resta ver el armado, si hay acuerdos con todos los sectores liberales y quiénes serán los candidatos, que pueden traccionar o restar.
El peronismo observa esos números y ve que puede crecer ante el fastidio de la gente que se multiplica al ritmo del ajuste y los tarifazos. Selló la unidad y avanza en la consolidación de un proyecto que no solo tiene en vista el 2025, sino también el 2027. Los bloques (PJ-NE y VcT) trabajan en ese sentido y el año próximo se espera -al menos- un interbloque. Se viene la etapa de la convocatoria a todos los partidos, sindicatos, agrupaciones y movimientos a conformar un bloque sólido anti-Milei en la provincia. ¿Se sumará la GCT? Hay anuncio de reunión en Bariloche de las tres seccionales de Río Negro con lema de «enfrentar» las políticas del gobierno nacional, un hecho inédito.
La llegada de Cristina Kirchner a la presidencia del partido generó un dique de contención para la diáspora peronista atraída por el poder hacia la Casa Rosada, con Martín y Lule Menem, Scioli y Ruckauf a la cabeza. Incluso algunos intentaron instalar la idea que «Milei es peronista» por su fanatismo menemista, el modelo del plan económico que implementó y su forma de gobernar. Sin embargo, el Jefe de Estado no hace más que repetir los errores del «gorilismo» argento. Otro gobierno que quiere «borrar» al peronismo y saca bustos, fotos, cambia nombres de edificios y calles que contengan los apellidos (Juan Domingo y Eva) Perón y (Néstor y Cristina) Kirchner, y quita la jubilación y la pensión a Cristina y Amado Boudou.
De todo esto abrevará el PJ rionegrino. Proyectado en el tiempo, se ve en la competencia mano a mano con los libertarios.
La que viene, para colmo con boleta única y probablemente sin PASO, será un contienda de dos que bajará a las provincias en forma de superclásico. ¿Queda espacio para los provincialismos? La respuesta la tiene el tiempo. Por ahora, los gobernadores que se reunieron en el CFI esta semana expresaron sus preocupaciones por la intromisión nacional en las provincias. Uno de ellos fue el radical macrista Maximiliano Pullaro, de Santa Fe. Otro, también de Cambiemos, Rogelio Frigerio, de Entre Ríos. A pesar de tener un espacio nacional ven que Milei avanza con sus candidatos y en la disputa con el PJ, ellos pierden. Aún teniendo referencia en un espacio nacional.
Esa preocupación está llevando al PRO y a la UCR a dar un debate necesario. ¿»Nos ponemos la peluca, o armamos un espacio del centro e intentamos sobrevivir?». Emilio Monzó, Horacio Rodríguez Larreta, Martín Lousteau y Facundo Manes lideran esta alternativa y quieren conducir a los gobernadores y salvar a Jorge Macri de una derrota en Capital. Con Patricia Bullrich, Luis Petri y varios gobernadores ex Juntos por el Cambio ya adentro de La Libertad Avanza, y con un Mauricio Macri que se diluye entre milanesa y milanesa en la Quinta de Olivos, promueven la salida por el centro y resistir.
Ese quizás sea el norte de los radicales rionegrinos que quieren arrebatarle -en internas- el partido a Pedro Sánchez el año que viene. No quieren que la UCR sea un apéndice de JSRN, al servicio de Weretilneck, y buscan un anclaje nacional.
Otros que esperan coordenadas más claras, son los lilitos de Río Negro. La reaparición de Elisa Carrió y su casi segura postulación pondrá a la CC-ARI local a jugar en el 2025. Lilita volvió a caminar por los medios de comunicación para instalarse en la oposición a Milei. ¿Será parte de la avenida del medio que promueven Monzó y Lousteau? Falta, pero no tanto.