Encuesta: 54% dice que «ya hubo suficiente motosierra»
(ADN).- La consultora Zuban-Córdoba publicó su nuevo trabajo titulado «Tecnofeudalismo vs Democracia» en el que recogen la percepción de los argentinos con el gobierno nacional. La encuesta destaca que un 53,6% de los consultados asegura que Milei lleva al país va por la dirección incorrecta contra un 43,9 que sostiene que estamos en la dirección correcta.
En relación a la aprobación del gobierno, un 54,1 (un aumento de dos puntos) lo rechaza contra un 45,1 que lo respalda mientas que la imagen negativa de Milei trepó a 53,8 por ciento, 1,3 mas que en la medición anterior.
Al margen de los datos negativos, un 44 por ciento reconoce que hay mayor estabilidad económica y que la inflación se desaceleró.
Otro dato que destaca la encuesta es que el 67,8 por ciento cree que el Estado debe garantizar las posibilidades entre todos los ciudadanos, a contramano del ideario libertario que repudia la idea de justicia social.
En línea con el tema de la desigualdad, el 66,5 por ciento cree que la distancia entre los más pobres y los más ricos es muy alta y un 20 cree que es alta. Es decir, un 86,5 por ciento de los encuestados remarca este con uno de los problemas más relevante de este momento.
Zuban Córdoba pone el ojo en la estabilización inflacionaria como una cuestión positiva entre los ciudadanos pero los apoyos se mantienen polarizados con un empate en 48,9 por ciento entre los que dicen defender a Milei por este motivo.
Sobre la oposición, un 52,6 pide un peronismo unido, más de un 50 reclama más resistencia de la CGT y un 61,1 dice estar decepcionado por la oposición. También hay un 47,9 que se siente decepcionado por el gobierno.
La encuesta hace referencia a una eventual reforma laboral y un retorno de las AFJP. Sobre lo primero, el 59,4 lo rechaza una nueva legislación para el mundo del trabajo mientras que un 58,9 no quiere la vuelta del sistema de jubilación privada. A su vez, el 54,6 considera que ya hubo suficiente motosierra, en un claro rechazo al ajuste.
Por último, el relevamiento indaga sobre los multimillonarios y el llamado tecnofeudalismo. En ese sentido, un 61,4 por ciento tiene una opinión favorable del CEO de Microsoft, Bill Gates, siendo el mejor valorado de los encuestados. Luego lo sigue Mark Zuckerberg con 47,8 por ciento de imagen positiva, Elon Musk con más imagen negativa que positiva (49-44,3) y Donald Trump con 52,4 de rechazo y un 43,6 de apoyo.
Análisis
(Por Gustavo Córdoba y Paola Zuban).- Para variar, la coyuntura política en Argentina se presenta dinámica e impredecible, impulsada ahora por una agenda internacional que, desde la asunción de Donald Trump en Estados Unidos, se encuentra en pleno estado de ebullición.
La llegada de Trump parece haber inaugurado una nueva etapa política a nivel global. Etapa marcada por la mezcla del crecimiento de nacionalismos intensos y la entrada a la política de forma abierta y explícita de las super élites económicas representadas por Elon Musk.
El cruce entre política y élites económicas no es ninguna novedad. En cualquier democracia moderna ambas están íntimamente vinculadas.
La gran novedad de los últimos tiempos es el intento de las élites de empezar a reemplazar a la política. Empresarios multimillonarios que saltan de los negocios al sector público con ánimos refundacionales. Lo que vemos en Estados Unidos y otros países, puede ser solo la punta de lanza de un nuevo modelo de acción política.
Por eso nuestro primer domingo de datos del año está dedicado a los millonarios y al nuevo fenómeno que vislumbramos a nivel global: el tecno feudalismo.
Los contrastes son evidentes. Las percepciones argentinas sobre los multimillonarios mezclan evaluaciones positivas con críticas al poder desmedido.
Como todo en nuestro país, estos datos deben ser analizados de forma equilibrada. Está claro que la sociedad valora el aporte de los grandes empresarios en el sector privado, pero ve con desconfianza y hasta preocupación sus incursiones en la política y en los asuntos públicos.
Al final de cuentas la sociedad Argentina demuestra tener en su análisis una madurez y un sentido común infinitamente superior al de sus élites.
Es un fenómeno naciente y complejo.
En la tierra de la libertad, los argentinos quieren igualdad
(Por Yanina Welp).- Parece una paradoja. Al filo del 2023, el país eligió al primer presidente anarcolibertario del mundo. Dos meses más tarde, en su primera visita al Foro Económico Mundial, Javier Milei dejaba claro que para él, el enemigo a batir son el Estado y sus promotores (todos comunistas). En su segunda visita a Davos, en febrero de 2025, un discurso misógino y homófobo (anti woke, según él) atrajo la atención mediática y el rechazo público. Pero el presidente argentino no trasladó el eje de la economía a la batalla cultural como consideraron algunos: “De los derechos negativos a la vida, la libertad y a la propiedad, pasamos a una cantidad artificialmente infinita de derechos positivos. Primero fue la educación, luego la vivienda…”, señaló.
Si todos los caminos llevan a Roma, para Milei toda acción positiva lleva al Estado, ese que hay que eliminar en aras de la libertad. Milei no cambió, cambió el mundo. Si en 2024 el presidente estaba casi solo, ahora está más firme en el gobierno y muy acompañado en la disputa global por la hegemonía. Acompañado, pero en un mar de confusión apenas unido por el espanto anti status quo. Trump decreta aranceles, pero acuerda soldados para custodiar la frontera con México. En Estados Unidos, un gesto nazi de Elon Musk desata la indignación global (Milei lo “defendió” en la montaña mágica) pero en Alemania se sienta con la candidata a canciller de la ultraderecha que tilda a Hitler de comunista. Y, como símbolo del devenir del tecnopopulismo autoritario, Nayib Bukele anuncia el fracaso del proyecto bitcoin mientras acuerda recibir deportados por Estados Unidos. La libertad de poner muros y llenar las cárceles.
La simpatía que generó Luigi Mangioni, el asesino del CEO de United Health Care, encendió una luz roja en un tema al que muchos venían apuntando: los ricos tienen cada vez más poder y los de abajo cada vez más bronca. ¿Los multimillonarios son vistos como el problema o son el modelo a seguir? ¿Su dinero, invertido sin trabas, se percibe como la solución? Hasta ahora hemos contado con pocos datos para saber qué piensa la población argentina.
Esta encuesta de Zuban-Córdoba, además de tomar el pulso político con sus variables habituales, presenta un sondeo que mide la valoración de figuras como Bill Gates, Elon Musk, Mark Zuckerberg y Donald Trump y pregunta por la percepción y expectativa sobre el Estado y los multimillonarios. Las opiniones están divididas y también agrietadas.
En la tierra gobernada por un libertario, sorpresas te da la vida: una mayoría cree que Milei gobierna para los multimillonarios (53,3%) y defiende los intereses de los mercados financieros (71,9%). La frutilla del postre: un 67,8% cree que el Estado debería garantizar la igualdad de oportunidades de los ciudadanos (con grieta y diferencias notables por género y edad) y que los millonarios deberían pagar más impuestos (66,6%). No es una paradoja. Los argentinos querían un cambio, pero no quieren quemar las naves.