Advierten que el kirchnerismo «ahora quiere domesticar a la Justicia»
Viedma.- El presidente del bloque de la Alianza Concertación para el Desarrollo, Bautista Mendioroz, evaluó que en el discurso inaugural de un nuevo período ordinario de sesiones en el Congreso de la Nación de la presidente Cristina Kirchner, «asistimos al último gran intento por domesticar al único Poder del Estado independiente que le queda a nuestro sistema democrático» en referencia a la propuesta presidencial de modificar el sistema judicial.
Para Mendioroz, «de prosperar esta iniciativa, que si observamos el triste y lastimoso papel de escribanía al que ha sido sometido el Parlamento no dudamos que será aprobada, la república quedará definitivamente de rodillas, con jueces elegidos y supervisados por los comisarios del kirchnerismo».
«Yo ya venía advirtiendo esta avanzada del gobierno nacional, que no ha dudado jamás en atropellar uno por uno los valores republicanos, para embestir de manera tan grosera contra la independencia del Poder Judicial» indicó.
Para el legislador radical, «este es un tema que nos debe hacer reflexionar sobre qué significa democratizar a la Justicia, ¿es multiplicar los Oyarbides?, ¿es tener jueces que se puedan controlar y sigan la penosa práctica de cerrar rápidamente las causas en contra de los funcionarios sospechados de corrupción o enriquecimiento ilícito? o ¿será tratar de asegurarse tranquilidad judicial para cuando dejen de ser gobierno?»
Mendioroz recordó que en este sentido «ya dieron un gran paso que es el control absoluto en el Consejo de la Magistratura» y se mostró extrañado de «aquella gran decisión de Néstor Kirchner de renovar la Corte Suprema con métodos transparentes, quiera ser demolida por quien él eligió como su sucesora»
El jefe de la bancada opositora indicó que «frente a este nuevo panorama, que es parte de una larga serie de medidas dentro del plan oficial ‘Vamos por todo’ y puestos de rehenes los integrantes del Poder Judicial de la Nación, sólo quedará como último resguardo de la Republica, una oposición madura, fuerte y responsable».
«Si esto no llegara a suceder, pobre Argentina, pobre Democracia», finalizó.
BAC