Ratifican 10 años de cárcel a tres jóvenes por un homicidio
Viedma (ADN).- En ámbito del Superior Tribunal de Justicia fue confirmada la sentencia de la Sala A de la Cámara en lo Criminal de Viedma, que condenó a tres jóvenes a 10 años de prisión por el delito de homicidio simple, en perjuicio de otro muchacho que se encontraba en un local y que fue herido de una puñalada. El hecho olcurrió el 10 de setiembre de 2010 en un tramo de la ruta nacional 3, cerca de la ciudad de Viedma.Julián Zela (23)y, Diego Oscar Tarruella (22) y Juan Cruz Tolosa (20) fueron condenados a través de la sentencia Nº 29, del 29 de noviembre de 2011.
La defensa de los imputados indicó que la sentencia es incongruente, porque “no se condice con la prueba de la causa” y estimó no acreditada la participación de sus defendidos en el hecho.
En este sentido, afirmó que ninguno de los testigos pudo identificarlos como coautores de la agresión y menos aún de la muerte de la víctima. Se opuso además al mérito de reconocimiento de prendas y dijo que estas no aparecen suficientemente definidas. Señaló que la presencia de sus asistidos en el local no indica que hayan sido los agresores que provocaron la muerte.
La defensa oficial, ejercida por Marcelo Chironi, en representación de uno de los condenados, remarcó que las pericias sobre las prendas de los tres arrojaron resultados negativos en cuento a la presencia de sangre. Agregó que no se secuestró un cuchillo en el domicilio de Juan Cruz Tolosa, sino que estaba en el nicho de gas y que tampoco fueron halladas huellas que vincularan a sus defendidos con el hecho.
Pero, el juez superior Sergio Barotto sustentó que está debidamente acreditada la coautoría de los tres imputados y añadió que “a los indicios que involucran a los tres coautores se agrega el de mendacidad de Diego Oscar Tarruella, porque sus dichos de que se encontraba en otro lugar al momento en que ocurrieron los hechos fueron desmentidos de modo fundado”.
Se relacionó que el cuchillo que se secuestró dentro del perímetro del barrio que todos los testigos aseguraron fue hacia donde escaparon los imputados y se sumó que en el lugar de los hechos, es decir desde donde se produjo la agresión y partieron éstos últimos, la autoridad policial secuestró una vaina de cuero color marrón con la misma inscripción (La Pampa Argentina) y calce perfecto.
Respecto de una botella, el informe del perito en papiloscopía dictaminó que presenta rastros de identidad física humana de Diego Oscar Tarruella y fue secuestrada en el lugar del hecho.
“Establecido que quienes acompañaban a Julián Zelay en el local nocturno eran los coautores aquí recurrentes y que la víctima fue agredida inmediatamente después de que estos salieran del local, en un lugar también cercano, por tres jóvenes, uno de los cuales era aquel, es indudable que se trata del mismo grupo inicial. Todos los indicios concatenados permiten arribar a la conclusión condenatoria, afirmación que la crítica de la defensa no logra rebatir”, mencionó Barotto. (ADN)
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