Sigue sin solución falta de médicos en hospitales de Río Negro
Viedma (ADN).- La falta de médicos en los hospitales rionegrinos sigue generando preocupación en pacientes y familiares. En Viedma sigue sin resolverse el reemplazo de neurocirujanos, porque uno renunció y otro está de licencia.
Por su parte, el legislador Jorge Ocampos solicitó al Ministerio de Salud de Río Negro que resuelva a la brevedad “la falta de profesionales médicos en el hospital Artémides Zatti de Viedma” y la urgencia incorporación de un tomógrafo.
“La falta de profesionales en los hospitales de de Río Negro es una constante desde hace tiempo. Es cierto que la demanda de atención crece día a día provocando grandes colas para sacar turnos, insuficiencia de la atención por falta de médicos en las distintas especialidades (aunque los que están hacen un esfuerzo enorme para atender a los pacientes que se presentan), infraestructura edilicia que no está a la altura de las circunstancias actuales ya que la población en las diferentes ciudades aumenta y todo se hace difícil de equiparar”, consignó Ocampos en una de sus primeras iniciativas parlamentarias.
El legislador cipoleño (recientemente asumió en reemplazo de Odarda) refirió que se ha elaborado un informe del que surge que son más de 80 los profesionales médicos que faltan en la provincia, siendo los más complejos los de Bariloche y Roca “con renuncias, malas condiciones laborales y sueldos bajos”.
Observó que el hospital Artémides Zatti de Viedma “se encuentra atravesando una crisis que lamentablemente se ha acrecentado debido a la falta de profesionales. A esto se le suma la renuncia de un especialista en neurocirugía, dejando una especialidad muy delicada sin atención, ya que el profesional que cubriría este lugar se encuentra con licencia”.
En cuanto a la inexistencia de tomógrafo en el hospital de Viedma, Ocampos describió que el costo de un tomógrafo es de aproximadamente $2.000.000, siendo que “se les abona anualmente a los centros privados una suma que ronda los $4.000.000 por año por el servicio de cada uno de los hospitales, dinero al que se le puede dar otro destino, como la incorporación de un aparato de estas características lo que redundaría en una eficiente atención a los pacientes que concurren a los hospitales cabecera en un nivel de alta complejidad como lo es éste”. (ADN)