Jefe de Rentas investigado por presuntas maniobras irregulares con costoso terreno
Bariloche (ADN).- El titular de la Delegación Bariloche de la Agencia de Recaudación Tributaria de Río Negro (ex Dirección de Rentas), Federico Martínez, fue denunciado ante la Justicia Penal por los posibles delitos de defraudación, asociación ilícita, enriquecimiento ilícito y negociación incompatible con la función pública, según informó la agencia ANBariloche.
Según la presentación realizada ante la Unidad Fiscal de Atención Primaria (UFAP), el funcionario se habría valido de información del organismo que conduce para forzar el remate de un valioso terreno ubicado en Villa Campanario (kilómetro 20 de la Avenida Bustillo). El lote fue adquirido por su suegro, el martillero Luis Agustín Tello, a un precio mínimo en relación al valor de mercado.
Según pudo determinar ANB, el terreno tendría un precio de unos 200 mil dólares, y fue rematado en algo más de $300.000, por una deuda de Impuesto Inmobiliario de apenas $5.537 ($8.444 con los intereses). El pasivo tributario corresponde a dos períodos de 2004 de ese tributo y otros de 2005 a 2008, y 2010.
La ejecución fiscal se concretó en junio de 2013, luego que Rentas promoviera el remate, a pesar que, según consta en la denuncia, el organismo provincial no habría cumplido con los pasos exigidos por normativa: la notificación fehaciente al propietario de la situación de deuda, y como consecuencia de esa acción la posibilidad que el dueño salde el pasivo exigido, describió el mismo medio barilochense.
De acuerdo a los datos incluidos en la presentación ante la UFAP por parte de la perjudicada dueña del terreno, Sandra Garibaldi, las notificaciones de Rentas se realizaron en un domicilio que no era el real, de tal forma que nunca pudieron ser avisados de la inminencia del remate. Además, la delegación Bariloche del organismo recaudador no puso en marcha los mecanismos de los que disponía para cobrar la deuda de algo más de $5.500: ni produjo la inhibición de bienes; ni buscó en el padrón electoral la dirección real de dueña; ni constató esa dirección con otros organismos.
La Municipalidad de Bariloche remite las facturas de la Tasa por Servicios al domicilio real de Garibaldi, en Buenos Aires.
No obstante las presuntas irregularidades, se llegó a la instancia de remate -convalidado por el juez Civil Carlos Cuellar-, oportunidad que fue aprovechada por Luis Agustín Tello, suegro del titular de Rentas Bariloche, para comprar -a nombre de un tercero- el valioso terreno.
Tello pagó la seña correspondiente, y el depósito por el monto global, lo realizó María Cristina Medos Rosenbrock. A pesar del tiempo transcurrido desde la subasta -junio de 2013- Rentas aún no retiró los fondos depositados.
Según pudo saber la agencia ANB, el domicilio que dio Tello en el marco de la operación, es Gallardo 477, correspondiente al estudio de contadora de su hija Mariela, la esposa del Delegado de Rentas.
Pocos meses después de la compra, Tello vendió el lote a Susana López, al doble del valor del remate, es decir algo más de 600 mil pesos.
La operación parecía encaminada a resolverse sin sobresaltos, pero el 27 de agosto de este año, los propietarios originales del terreno recibieron una llamada anónima informando lo sucedido. Un empleado de Rentas, que protegió su identidad, les advirtió sobre la maniobra. Dos días después, el 29 de agosto pasado, una abogada de Bariloche -en representación de Garibaldi- presentó ante el Juzgado Civil un pedido de nulidad de la subasta y de la escrituración. Este último trámite se encuentra ahora detenido administrativamente.
Paralelamente, la semana pasada, se realizó la denuncia en la UFAP contra Martínez, Luis Agustín Tello, Mariela Tello y Susana López, última compradora del lote. Se los acusa de «defraudación», «asociación ilícita», «enriquecimiento ilícito», y «negociación incompatible con la función pública», describió el medio periodístico.
De acuerdo a la misma fuente interna de Rentas que dio aviso del hecho a la propietaria original del lote de Villa Campanario, éste no sería el único caso, y en los últimos años se habría repetido la maniobra con otros terrenos. La investigación judicial, entonces, podría ampliarse y alcanzar las operaciones inmobiliarias realizadas por una empresa -hoy en proceso de disolución- de la que Martínez y Tello forman parte. Esa firma, denominada Las Glicinas S.A., tiene como objeto la compra y venta de inmuebles, y la intermediación en operaciones inmobiliarias.